- Se rumora que hoy por la noche habrá balacera.
- Si, yo también lo escuché
- Habrá que tener cuidado - decía un tercero.
Mierda! Y yo que no conozco mucho la ciudad, de seguro me voy a perder! Ya me dio miedo y no traigo a mis perros guardianes (2 Schnauzer medianos y 1 French bebe nuevo). Ni pedo, me tendré que ver como un gran macho tipo Machete y esconderme, jejeje.
Al final del curso, temeroso de emprender la retirada y acabar en algún lugar y momento equivocado, les mencioné:
- Oigan, generalmente no tengo idea de donde estoy, ¿alguien me puede ayudar?
- Si claro, nosotros te llevamos - contestó alegremente uno de los asistentes.
- Claro, solo siguenos, te llevamos - dijo su fiel amigo.
Perfecto, pense para mi mismo. Eso es lo bueno de ser excelente expositor (ajá).
- Mira, deja traigo la camioneta y nos sigues, no te muevas de aquí
- Ok, aquí los espero - contesté.
Así que la primera camioneta que vi, me le pegué como Kevin Costner en aquella legendaria y horrible película del Bodyguard. Al ir avanzando, notaba que los chavos aceleraban, se cambiaban de carril, se metían entre otros carros en maniobras peligrosas y ondas así. Wow, me están poniendo un reto, pensé yo. Me la pelan! Pero por otro lado también pensaba: Mmmm, creo que hemos avanzado mucho, no recuerdo que fuera tan lejos.
Cuando de repente, los chavos se paran, se bajan y se acercan, bien pálidos como inshes zombies:
- Ahhhh! Es usted!!!! Pensamos que ya nos iban a robar o balacear.
- Maldición, creo que me equivoqué de camioneta, ¿los espante?
- Siiiiii!!!!! No tiene ni idea de a donde va, ¿verdad?
- No - contesté muy triste - ni idea
- Bueno, lo llevaremos, pero no nos ande dando ese tipo de sustos.
Jejejeje, que cagado estuvo. Por cierto, si se lo preguntan, esa noche si hubo balazos, desde mi cuarto de hotel escuché.
