jueves, 22 de octubre de 2009

Detalles, personas, despedidas

La vida funciona de maneras maravillosas. Cada día, momento a momento, te va presentando un sin fin de detalles que llegas a valorar y que irremediablemente te transportan a otro lugar, lleno de recuerdos, de sentimientos, de vida. Son detalles que para cualquier persona pudieran parecer sin sentido, pero que para cada uno de nosotros llegan a representar cosas muy bonitas.

Precisamente el día de ayer, mientras comía una pierna de pollo y peleaba contra el hueso y las demás cosillas propias del chicken como el nervio y esas ondas; esos detalles fueron como un shock para mí.

Cuando era pequeño, me era más difícil comer una pieza completa, generalmente terminaba desperdiciando la mitad, jajajaja. Pero un día, vi comer a mi abuelita (que de ahora en adelante llamaré mamá) y ella me enseñó que se le puede sacar mucho provecho al hueso, y aunque pueda resultar un poco desastroso, al final es divertido.

Una de las tantas cosas que aprendí de mi mamá, quien me cuidara, me regañara, me consintiera, me platicara. De esa personita que me limpiaba la colita cuando yo era un bebé, que me preparaba sus milenarios remedios y papillas caseras, además de usar conmigo y mi hermano sus dudosos tratamientos caseros. Esa personita hermosa que me enseñó a amar a los animales con tanta dedicación por que me hizo ver que al final generalmente son mejores que las personas.

Sin ella en mi vida simplemente yo no sería el mismo el día de hoy. Recuerdo que siendo adolescente una vez me vio y me dijo: tú tienes cara de licenciado. Jejeje, y le tomé la palabra con una dedicatoria.
Mi mamá se fue en febrero, pero de alguna manera sigue aquí y nunca podrá irse. Solo quería decir que ella está presente en todo lo que soy hoy día, hasta el más mínimo detalle. Agradezco a Dios que la haya escogido para ser mi mamá, y la agradezco infinitamente a ella que lo haya hecho de esa manera tan linda. Donde quiera que estés, gracias mamá Micaela.

1 comentario:

  1. Qué linda dedicatoria. Las personas que nos regalan marcas de vida jamás se van de nuestro lado.

    Saludos y gracias por la visita.

    ResponderEliminar